jueves, 25 de noviembre de 2010

CONOCIMIENTO Y PODER

¿Cuál es la verdadera relación entre el saber y el poder? Si hacemos una recapitulación en la historia y en los hechos que han forjado nuestro presente  podremos percatarnos que han sido motivados por grupos selectos de la sociedad, o por aquellos en los que el hostigamiento es tanto que es necesario alzar la voz para ser escuchados y actuar conforme sus ideales. Mahatma Gandhi logró una paz sin armas, Alejandro Magno al trote de su fiel caballo llegó a conquistar los elefantes de medio oriente, Juan Pablo II logró cambiar el pensamiento de millones en todo el mundo, Hitler desencadenó la más cruenta guerra que haya sido contemplada por la humanidad y mi madre logró educarme de acuerdo a lo concretado como correcto.
Es entonces cuando cuándo nos preguntamos ¿Qué hay de diferente en esas personas con mi yo? ¿Talento? ¿Capacidad?, muchas veces escuchamos que todos poseemos las mismas capacidades pero cuando veo que mi propia ciudad está controlada por un grupo élite de la sociedad, me otorgo el privilegio de la duda; más he aquí mi versión a esa gente, esa minoría, haya nacido en cuna de oro o rodeado de las masas tienen visión y sed de poder, es cierto que todos soñamos con ser grandes pero nos truncamos en eso, una simple utopía que se va desvaneciendo al percatarnos de la ya casi monotonía rutinaria de nuestra vida.
En lo personal, me postuló a favor que el conocimiento nos da poder, pero ¿Qué es el poder? Foucault, uno de los más grandes filósofos y estudioso del tema no dice:
Para Foucault, el poder son acciones sobre otras acciones a fin de interferir con ellas. Foucault no recurre a la violencia, sino que afirma que el poder presume libertad en el sentido en que el poder no es forzar, sino formas de hacer que la gente se comporte por sí misma de modo distinto de cómo lo hubiesen hecho de otra manera.[1]
Acepto este pensamiento como verdadero, puesto que a mi juicio, muy personal, el que conoce tiene una posición privilegiada con respecto a una mayoría, la cual le da la capacidad en la toma de decisiones,  y en influir en el pensamiento de las masas, logrando así obtener un beneficio social, o simplemente intereses personales.
La religión, cualquiera que fuese, es una de las empresas con más poder sobre toda la humanidad, y ¿Por qué? ¿Cuál es el verdadero poder de las instituciones eclesiásticas en nosotros? Porque la iglesia conoce nuestras debilidades, nuestros anhelados sueños, pero sobretodo  las necesidades de las cuales somos víctimas, de crear una imagen protectora que estará ahí para salvarnos en los momentos difíciles en la trayectoria por esta corta vida. Demostrando que el cognoscente en este particular caso son las autoridades religiosas apoyadas en la creación de un ser todopoderoso y el ignorante es el proletariado, el pueblo raso y común.
En lo que concierne al ámbito político, la mayoría del pueblo tenderá a opinar que es el factor económico lo que hace a este sector tan poderoso; y no lo niego el dinero es una fuente de poder muy valiosa más no es el objeto de estudio en este texto. Analicemos, desde otra perspectiva la situación privilegiada que el gobierno ha tenido desde inicios del hombre como ser perteneciente a una sociedad, sea monarquía, sea república, las esferas políticas fungen una labor muy importante en nuestras vidas pero ¿Por qué influyen tanto en nuestras actividades? Ellos son poderosos porque tienen la facultad de legislar lo que el pueblo quiere escuchar, lo que el proletariado desea ver, aunque no se cumpla, si un político amado y respetado por las mayorías dice algo que siempre ha sido anhelado por una entidad, nación o colonia la gente le creerá, y lo seguirá. Comprobando una vez más que aquel que tiene conocimiento sobre las causas por las que lucha el ignorante, y sobre todo de su punto más sublime éste se mantendrá en el poder.
Nicolás Maquiavelo es uno de los grandes estudiosos sobre el tema del poder, aunque lo trata de una manera muy cruda y hasta cierto punto antiético debo aceptar que la gran mayoría de sus ideales son necesarios para conservar el ambicioso poder. He aquí unas palabras a su pensamiento:
Aquel que ayuda a otro a alcanzar el poder está condenado a caer, porque para conseguirlo habrá utilizado o su ingenio o su fuerza, y ambas cosas resultan incómodas para el que se ha vuelto poderoso.[2]
Por otra parte, no es necesario tener algún puesto político, ni religioso, ni ser graduado de la mejor universidad para dar dotes de poder; en casa por ejemplo, en la mayoría de las familias el poder reside en el hombre, quien se encarga de mantener el orden, y que no falte nada para el bienestar de los hijos sin dejar de cumplir su función como marido, volviendo de nuevo al mismo punto donde se conocen las necesidades de las personas que están a cargo de él, y sobre todo las cumple logrando una armonía en la convivencia; aceptado por los hijos como el ser en quien reside poder y al cual se le tienen que rendir cuentas.
A juicio de otros, el conocimiento no nos da poder; un ejemplo seres que pasan su vida entera dedicadas al estudio, a los libros y que son sumamente cultos por lo general pasaban desapercibidos en nuestra sociedad. Esto se debe a que no tienen visión, no poseen una cultura emprendedora que los motive a usar ese alto grado de saber para beneficio de todo un pueblo. El poder está en todas partes dice Foucault, no es algo q se posea o sea innato, sólo debemos aprovechar esa oportunidad y hacerla única.
Finalmente, manteniendo mi postulado con firmeza, postuló que el conocimiento nos da poder, porque podemos influenciar en la mente del ignorante, y lograr que actúen conforme nuestro ideal, sin embargo no basta con el pensar, son una serie de factores que tienen como base el conocimiento los que nos permiten llegar al poder entre ellos tener metas y objetivos en la vida, ser críticos, actuar con firmeza, tal vez aparentar virtudes y negar defectos; estas son las necesidades del poderoso y entendemos que por obvias razones deben de ser pocos, muy pocos, los que alcancen este anhelo para mantener así el orden aceptado hasta el día de hoy.



[1] Frases del pensamiento de Michael Foucault ( 1926-1984)
[2] Maquiavelo Nicolás, El Príncipe.

No hay comentarios:

Publicar un comentario